La diarrea en los niños es la segunda causa de consulta en las urgencias infantiles, tras los procesos respiratorios. En los países desarrollados no es causa de fallecimiento aunque sí de hospitalizaciones.
El 80% de las diarreas en niños están causadas por virus, de los cuales el más frecuente es el rotavirus, que predomina en los meses de invierno e inicios de primavera. Otros virus menos frecuentes son el norovirus (causa más frecuente de diarreas en niños vacunados contra el rotavirus) y el adenovirus. También pueden causar diarreas las bacterias como el Campylobacter o la Salmonella, y algunos parásitos como Cryptosporidium y Giardia.
La presencia de estos gérmenes en el intestino provoca una secreción aumentada de agua y sales, que es lo que provoca la diarrea.
Las diarreas causadas por virus suelen ir precedidas de vómitos y acompañadas de dolor abdominal, fiebre, síntomas respiratorios e incluso deshidratación. Los cuadros más intensos los produce el rotavirus.
Dado que el principal riesgo es la deshidratación, el tratamiento irá encaminado a intentar evitarla administrando una solución de rehidratación oral (SRO) en pequeñas cantidades y frecuentemente. Si el bebé hace lactancia materna, la mantendremos, intentando hacer tomas más cortas y frecuentes.
No hace falta cambiar la dieta aunque hay que evitar grasas, azúcares y refrescos (no está recomendado el uso de Aquarius® y similares para el tratamiento de la diarrea). Es recomendable ofrecer alimentos de manera precoz, sin forzar al niño.
En general, no hay que dar ningún fármaco para tratar la diarrea, excepto en algunos casos que tu pediatra te indicará. Sí que podemos ofrecer algún probiótico que contenga Lactobacillus GG y/o Saccharomyces boulardii, que son los únicos que han demostrado eficacia en acortar los días de diarrea y su intensidad.
La mejor manera de prevenir estas infecciones es con un buen lavado de manos o uso de geles hidroalcohólicos, dado que la vía de transmisión es fecal-oral.
También podemos prevenir la infección por rotavirus, que es el germen más frecuente, vacunando a nuestros hijos. Existen en el mercado 2 vacunas no financiadas, las 2 orales, eficaces y seguras. Rotateq® es una vacuna pentavalente que se administra en 3 dosis, empezando entre las 6 y las 12 semanas de vida y hay que completarla antes de las 32 semanas, con persistencia de anticuerpos en intestino hasta los 7 años de vida. Rotarix® es una vacuna monovalente que se administra en 2 dosis, empezando entre las 6 y las 16 semanas y hay que completarla antes de las 24.
En España, con coberturas inferiores al 50% (recordemos que es una vacuna no financiada), se ha visto una disminución de los ingresos hospitalarios por rotavirus de un 70%. Si tienes un bebé menor de 2 meses, tu mejor opción es vacunarlo.
Texto. Dr. Raúl Morales, pediatra en mediQuo.
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