La reacción de cada paciente cuando se le dice que tiene cáncer de mama depende de la situación familiar, cultural, social y laboral, así como de su carácter y su personalidad, y hasta de sus creencias. Pero la mayoría experimentan sentimientos similares. El diagnóstico de cáncer y su tratamiento suponen una verdadera alteración de la vida cotidiana de cualquier persona, y generan gran incertidumbre con respecto al futuro. Nuestra especialista, Orleidis Lozada, nos acerca este tema para abordarlo desde lo primero que se debe saber, el tratamiento que se debe seguir y el estado psicológico por el que se pasa.
Lo más importante es que la paciente, reciba información clara, concisa y adecuada, apoyo emocional de su entorno, cariño y protección, apunta la doctora Lozada.
Lo primero que debe saber
- El cáncer de mama SE CURA. El 80% de las mujeres con cácer de mama supera la enfermedad.
- Existen estudios genéticos que pueden predecir la posibilidad de padecer cáncer de mama de origen genético. Esto quiere decir que puede prevenirse en algunos casos
- Las estrategias actuales para la prevención y el diagnóstico precoz son muy eficaces.
- Los tratamientos como la cirugía, quimioterapia y/o radioterapia obtienen brillantes resultados y son bien tolerados.
- El pronóstico de esta enfermedad es cada día mejor.
Información del futuro
Una vez realizado el diagnóstico de sospecha de cáncer de mama, los pasos a seguir deberían ser:
- Estudio oncológico completo y exhaustivo, por especialista en oncología.
- Biopsia.
- Tratamiento quirúrgico si está indicado según el estadío del tumor.
- Quimioterapia. Radioterapia. En algunos casos, hormonoterapia, si están indicados según el tipo y estadío del tumor.
- Seguimiento y revisiones periódicas.
Tratamiento quirúrgico
Es el tratamiento de elección más frecuente en el cáncer de mama que es diagnosticado precozmente. Existen diferentes técnicas que dependerán del tamaño, la localización y la extensión del tumor. Algunas son más conservadoras y consisten únicamente en la extipación del tumor con o sin tejido extendido. Otras son más agresivas, y ameritan quitar toda la mama, o casi toda, y pueden conllevar reconstrucción inmediata sólo en algunos casos.
En la cirugía del cáncer de mama siempre se estudian los ganglios axilares. El linfedema posterior puede ser una complicación.
Quimioterapia
Se administra casi siempre tras la cirugía, para completar el tratamiento y prevenir la aparición de posibles metástasis. El tratamiento dura varias semanas. Se administra un catéter permanente que permanece puesto durante todo el tratamiento para evitar los constantes pinchazos.
Los quimioterápicos viajan por la sangre, y destruyen las células tumorales, pero afectan también nocivamente parte de los tejidos sanos y por eso dan efectos secundarios indeseables como la caída del cabello, vómitos, pérdida de peso, retención de líquidos, malestar general, etc. Pero siempre es importante recordar que su beneficio es mucho mayor que estos efectos adversos.
Radioterapia
Se utiliza en los casos de cáncer de mama más avanzados, y también tiene una duración de varias semanas recibiendo radiación. Las sesiones de radiación no duelen, ni siquiera se sienten, y su objetivo es “quemar” el tejido tomado por cáncer, pero también afecta las zonas cercanas, causando alteraciones sobre todo en la piel y los tejidos superficiales, como edema, resequedad, y agrietamientos. De nuevo, es importante recordar que su beneficio es mucho mayor que estos efectos adversos.
Seguimiento y revisiones
Son necesarias para evaluar, y en lo posible evitar, el riesgo de padecer otro tumor en la otra mama o que el mismo tumor se reproduzca. Las revisiones se realizaran periódicamente, siguiendo los protocolos establecidos. Al principio cada dos o tres meses durante 2 años, luego semestrales, y a partir del quinto año, anualmente.
Reconstrucción después de la mastectomía
La cirugía de reconstrucción de la mama puede hacerse de forma inmediata, durante la misma operación de mastectomía, o se puede postergar para más adelante. Esta decisión muchas veces va a depender de la extensión del tumor, y los recursos del centro donde se realiza el tratamiento.
Las mamas se reconstruyen con implantes o con tejido propio de la paciente, y siempre se busca el mejor resultado estético. En la actualidad, el protocolo más frecuentemente aplicado es el de reconstrucción de la mama con cirugía reparadora inmediata, con implantes.
Estado psicológico
Tanto la enfermedad, como los tratamientos afectan en mayor o menor grado el estado psicológico de las pacientes. Comúnmente pueden sentir:
- Estrés, ansiedad, miedo, desesperanza.
- Angustia, cansancio, tendencia a la depresión.
- Confusión, deseo de tener y no tener información a la vez.
- Preocupación por el dolor, y los efectos secundarios de los tratamientos, la cirugía y la quimioterapia.
Por todo lo anterior, las unidades de tratamiento integral del paciente oncológico suelen contar con especialistas de otras disciplinas, como psicooncología, y es sumamente importante hacer uso de ellos. Asimismo, se puede realizar ejercicios de meditación o yoga para aprender a convivir con los sentimientos negativos. Para mejorar la calidad de vida de la paciente, también es importante:
- Aprender a gestionar el estrés, la ansiedad y la depresión.
- Llevar una dieta sana, sin recurrir al uso de suplementos vitamínicos a menos que estén indicados por su especialista.
- Aceptar la nueva imagen corporal y estimular la autoestima.
- Retomar la actividad laboral y mantener las actividades de ocio y las relaciones sociales.
- Mantener una buena red de apoyo con familiares y amigos.
- Recordar que en la actualidad, la mayoría de las mujeres ganarán la batalla contra el cáncer y eventualmente esto se convertirá en cosa del pasado.
*Contenido validado por el equipo médico de mediQuo.