El café es una bebida excitante muy común en nuestra sociedad, que consumen tanto hombres como mujeres. Durante el periodo de gestación es preciso tener cuidado con muchas sustancias que se ingieren de manera habitual, pero ¿cómo influye el café en el embarazo?
Café, cafeína y embarazo
El café contiene cafeína que es un estimulante del sistema nervioso, por eso muchas personas sienten que les ayuda a estar más concentrados en sus quehaceres y a afrontar la actividad diaria con más energía.
Es preciso decir que esta sustancia se encuentra también en otros alimentos como el té, chocolate o refrescos, entre otras.
La Organización Mundial de la Salud recomienda que en el periodo de gestación no se tomen más de 300 mg (4 tazas de café de cafetera) de cafeína al día para reducir el riesgo de pérdida del embarazo y de bajo peso al nacer.
Otros organismos, después de realizar estudios sobre la influencia de la cafeína en el embarazo, sitúan esta cifra en 200 mg (dos tazas pequeñas de café) diarios.
En la mujer embarazada, el café puede provocarle molestias digestivas debido al aumento de secreciones de jugos gástricos, aumentando así la acidez estomacal común durante la gestación.
Demasiada cafeína influye en el desarrollo del feto
Sobrepasar estos niveles aumenta el riesgo de parto prematuro y una disminución del peso del bebé en el nacimiento, ya que se restringe el flujo sanguíneo a la placenta, perjudicando así el desarrollo fetal.
Esto se debe a que, al ingerir café durante la gestación, la cafeína atraviesa la placenta y se acumula en los tejidos fetales. Esto tiene como consecuencia que con el paso de los mese sea más difícil eliminarla.
El organismo humano tarda entre cuatro y seis horas en eliminar la cafeína una vez ingerida. En el caso de las embarazadas este plazo puede elevarse hasta 18 horas, con el perjuicio que eso conlleva.
La recomendación para aquellas mujeres que están buscando embarazo, sería ir disminuyendo la cantidad de café consumida diariamente de forma paulatina. Otra opción es sustituir esta bebida por otras que no contengan cafeína, como infusiones, zumos caseros de frutas… Si no se puede evitar dejar de consumir café, entonces deberá tomarse descafeinado durante un tiempo.
Ante la duda, recuerde consultar siempre al especialista sobre si puede tomar café y la cantidad máxima para evitar perjudicar al feto.
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*Contenido validado por el equipo médico de mediQuo.
