Debido a la situación actual que estamos atravesando a consecuencia de la pandemia, la ansiedad puede provocar episodios de insomnio ocasional. Según la Organización Mundial de Salud (OMS), un 60% de la población está sufriendo las consecuencias de la “fatiga pandémica”.
El tratamiento del insomnio tiene el objetivo de mejorar la satisfacción respecto al sueño, para conseguir así, mayor calidad y cantidad, y que desaparezcan los efectos negativos diurnos. Conoce las manifestaciones más características del insomnio en este artículo.
Los tratamientos habituales
- Medidas de higiene del sueño: Recomendaciones sobre hábitos saludables de conducta para ayudar a mejorar el sueño.
- Intervenciones psicológicas: Pueden ser individuales o grupales, con diferente grado de complejidad, orientadas al manejo y modificación de pensamientos y de conductas que mantienen el insomnio y/o sus consecuencias.
- Medicación: Para el tratamiento del insomnio, los hipnóticos son los medicamentos más utilizados. Aunque parezca la solución más fácil, su uso se limita a aquellos casos en los que no se responda a las medidas previas (higiene del sueño, intervenciones psicológicas) y durante el menor tiempo posible, debido a sus efectos secundarios.
Las sustancias/fármacos usados para dormir
Se clasifican en:
- Extractos vegetales:Con acción relajante como la valeriana, pasiflora, tila o melisa.
- Melatonina: Reguladora del ciclo del sueño. Especialmente indicada en algunos casos en población infantil, en trabajadores a turnos y a partir de los 55 años de edad.
- Antihistamínicos: Compuestos que pueden obtenerse de venta libre en farmacias (ej. Dormidina (R) – doxilamina).
- Benzodiazepinas: De diferente duración (ej. lorazepam, diazepam), son los más ampliamente usados.
- Hipnóticos Z: De corta duración. Para tratar el insomnio de conciliación.
- Antidepresivos: En algunas ocasiones se utilizan antidepresivos con acción sedativa para favorecer el descanso nocturno.
- Antipsicóticos: utilizados en algunas enfermedades o si no pudieran usarse los fármacos anteriores.
Para encontrar el tratamiento más adecuado para su problema, consulte con su médico. Cuéntele sus síntomas físicos, qué otros tratamientos sigue y sus hábitos de sueño. En relación con las distintas opciones de tratamiento, es fundamental que exprese sus preferencias.
Texto. Dra. Sara Márquez, psiquiatra.
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