La cataplexia es una enfermedad poco común que consiste en la pérdida total o parcialmente repentina del tono muscular como causa de una alteración fuerte y repentina en el estado anímico y suele asociarse al 20% de las personas con narcolepsia, un trastorno crónico del sueño.
A diferencia de la narcolepsia caracterizada por padecer sucesivos ataques de sueño, la cataplexia ocurre debido a emociones fuertes como la risa o el llanto y a consecuencia de esto se provoca una pérdida del tono muscular.
Las personas que padecen esta enfermedad sufren ataques de unos 30 segundos sin poder controlar sus músculos ni moverse. Normalmente el cuello se relaja y deja caer la cabeza hacia delante, la mandíbula baja y las rodillas pueden doblarse, ocasionando caídas.
Síntomas
Los síntomas más habituales de la cataplexia son:
- Debilidad muscular repentina o incapacidad de controlar de forma total o parcial los músculos del cuerpo.
- Relajación de los músculos, lo que ocasiona que la cabeza caiga hacia adelante y la mandíbula hacia abajo.
- Los músculos de la cara pueden contraerse mostrando muecas o expresiones que no se pueden controlar.
- Pueden existir dificultades para pronunciar palabras.
- En ocasiones pueden darse mareos y desmayos.
Tratamiento
La cataplexia es una enfermedad que no tiene cura, sin embargo, existen tratamientos que reducen sus síntomas que emplean medicamentos antidepresivos, teniendo también efectos contra la somnolencia diurna.
Se recomienda establecer técnicas de relajación en la rutina diaria y de descanso, además de llevar una dieta saludable, evitar el alcohol y tabaco resultará eficaz para evitar los ataques.
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