La anemia, según datos de la OMS (Organización Mundial de la Salud), está presente en un 25% de la población con una elevada prevalencia en mujeres en edad fértil pero también en niños. Nuestra doctora Esther Méndez, nos aclara el concepto de la anemia y nos propone cómo prevenirla o cómo ayudar a tratarla más rápidamente.
Es una afección por la que los glóbulos rojos que se encargan de transportar el oxígeno a las células se encuentran disminuidos. En la analítica se puede detectar con un valor de Hemoglobina por debajo de 13 gr/dL en los hombres y de 12 gr/dL en las mujeres.
Hay diferentes tipos de anemias pero el más prevalente es la ferropénica en la que los depósitos de hierro de nuestro cuerpo están bajos y esto dificulta la fabricación de suficiente hemoglobina.
¿Causas de la anemia ferropénica crónica?
- Pérdidas de sangre habituales: menstruación, sangrado digestivo por diferentes patologías.
- Problemas de malabsorción en el tubo digestivo: en enfermedades como la celiaquía, el Crohn o la colitis ulcerosa en pacientes a los que se les ha realizado cirugía de resección de estómago o intestino.
- Dieta deficiente: De especial importancia en la infancia, en el embarazo y en deportistas de alta resistencia por el aumento de consumo del hierro. Aunque esta causa es más frecuente en países desfavorecidos o en dietas estrictas no controladas por un nutricionista.
- Otros problemas de salud: enfermedades con mayor velocidad de destrucción de los glóbulos rojos o consumo prolongado de algunos medicamentos.
¿Cuál es el tratamiento ambulatorio?
- Diagnosticar la causa subyacente para evitar que se produzca.
- Suplementos orales de hierro recetados por un profesional médico con controles analíticos posteriores para asegurarnos de la corrección de la ferropenia y evitar la sobredosificación. Actualmente hay comercializados comprimidos que contienen hierro liposomado junto a vitamina C que suele mejorar la tolerancia gastrointestinal al hierro oral y mejorar su absorción.
¿Cómo prevenirla o cómo ayudar a tratarla más rápidamente?
- Con una dieta rica en:
- Hierro: Puede proceder de alimentos de origen animal (hierro hemo) que se absorbe hasta un 25% o vegetal (hierro no hemo) que se absorbe entre un 5-10%.
- Animal: moluscos (almejas, berberechos, mejillones), pescado (sardinas), crustaceos (gambas y langostinos), carnes rojas (sin abusar si ya tomas frecuentemente), vísceras (hígado), huevos.
- Vegetal: legumbres (habas, lentejas), cereales integrales, verduras de hoja verde (espinacas), frutos secos (pistachos), fruta desecada.
- Hierro: Puede proceder de alimentos de origen animal (hierro hemo) que se absorbe hasta un 25% o vegetal (hierro no hemo) que se absorbe entre un 5-10%.
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- Vitamina C: reduce el hierro de su forma férrica a la ferrosa y esto hace que la absorción llegue a triplicarse. Por ello se recomienda en nuestra dieta consumamos los dos nutrientes de forma simultánea y evitando los lácteos, té y café hasta pasadas dos horas.
No solo son ricos en vitamina C la naranja y el limón, de hecho los siguientes alimentos contienen mayor cantidad de vitamina C por 100mg de peso:- Guayaba (228 mg)
- Grosella negra (200 mg)
- Pimiento rojo (190 mg)
- Perejil (120 mg)
- Kiwi (93 mg)
- Col rizada (93 mg)
- Brócoli (89 mg),
- Coles de Bruselas (85 mg)
- Fresa (80 mg)
- Vitamina C: reduce el hierro de su forma férrica a la ferrosa y esto hace que la absorción llegue a triplicarse. Por ello se recomienda en nuestra dieta consumamos los dos nutrientes de forma simultánea y evitando los lácteos, té y café hasta pasadas dos horas.
Recuerda que la dieta te ayudará a mejorar tus depósitos de hierro y a que el tratamiento sea más efectivo pero solo con dieta no se puede curar una anemia, indica Esther Méndez. Tienes alguna duda, únete al grupo de la doctora y pide consejos a los demás usuarios del grupo.
*Contenido validado por el equipo médico de mediQuo.
