En el universo de los tratamientos para la diabetes, un descubrimiento reciente ha comenzado a eclipsar la notoriedad de Ozempic. Se trata de tirzepatida, el componente clave de Mounjaro, un fármaco que ha mostrado resultados significativos en la reducción de los niveles de azúcar en sangre y una considerable pérdida de peso, superando a sus competidores.
Mientras Ozempic ha sido el centro de atención en plataformas como TikTok, programas de entrevistas y medios de prensa debido a su uso no autorizado para la pérdida de peso, este otoño ha surgido un nuevo protagonista en el escenario de los medicamentos para controlar la diabetes y el peso: Wegovy. Sin embargo, la última sensación es Mounjaro, un medicamento destinado a la diabetes que ha estado llamando la atención de muchos, aunque su uso para fines de pérdida de peso aún no esté aprobado. Investigaciones recientes sugieren que Mounjaro podría superar en potencia a Ozempic y Wegovy.
Un estudio crucial que comparaba estos medicamentos reveló que tirzepatida, el componente activo de Mounjaro, generaba descensos más pronunciados en los niveles de azúcar en sangre y una mayor pérdida de peso en comparación con otros tratamientos. Sin embargo, es importante destacar que este estudio comparó distintas dosis de semaglutida y tirzepatida, lo que complica la determinación de la superioridad de estos medicamentos, según Dean Schillinger, experto en diabetes de la Universidad de California en San Francisco. Además, es relevante mencionar que este estudio fue financiado por Eli Lilly, la compañía detrás de Mounjaro.
Actualmente, Mounjaro cuenta con la aprobación de la Administración de Alimentos y Medicamentos (FDA) únicamente para el tratamiento de la diabetes tipo 2. A pesar de esto, en su sitio web oficial se destaca que Mounjaro no está concebido como un medicamento para la pérdida de peso, aunque se mencione que las personas que lo consumen han experimentado una reducción de hasta 11 kilos. En octubre, Eli Lilly anunció que la FDA agilizó la revisión y aprobación de tirzepatida para adultos con sobrepeso u obesidad.
La FDA no se pronunció específicamente sobre estas solicitudes. Sin embargo, la demanda por Mounjaro está creciendo: tras una escasez de dos meses, el medicamento está nuevamente disponible en la mayoría de los establecimientos, aunque muchos pacientes con diabetes aún encuentran dificultades para adquirirlo. Según Andrew Kraftson, experto clínico asociado en Michigan Medicine, la escasez ha obligado a algunos pacientes a recorrer varias farmacias en búsqueda del medicamento, y algunos médicos han tenido que ajustar las dosis para garantizar su disponibilidad.
«Es frustrante tanto para los pacientes como para los médicos», declara Kraftson. Con el aumento del uso de Mounjaro para el control de peso, es probable que este medicamento supere a Ozempic tanto en atención mediática como en ventas.
«Decir que es un éxito de ventas no sería subestimarlo», concluye Kraftson.
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